El Barça femenino despidió este domingo en el Johan Cruyff a tres leyendas del club: Mariona Caldentey, Sandra Paños y Jonatan Giráldez. El acto de despedida fue la culminación de una temporada histórica del equipo, ganador de las cuatro competiciones en las que ha participado: Champions, Liga, Copa de la Reina y Supercopa de España. Es obligatorio poner en valor todo lo que han hecho. Jonatan Giráldez y su cuerpo técnico han creado un microclima muy particular. He convivido con ellas y con ellos muchas veces y lo puedo evidenciar.
Toca ahora seguir dándole continuidad al éxito. El escudo pesa y ello nos permite que muchas futbolistas quieran seguir con nosotros a pesar de estar recibiendo ofertas muy importantes de otros clubes. Esa continuidad está asegurada. Me lo dijo Markel Zubizarreta antes de irse. Tenemos un equipo de altísimo nivel y una gran cantera. De hecho, el Barça B femenino también ha ganado su Liga. Lo ha hecho por segunda temporada consecutiva. El futuro está asegurado para muchos años, también porque el equipo femenino es una apuesta firme del club. Duele que haya gente que se atreva a afirmar que esta junta directiva no cree en el femenino y se acabará cargando un equipo que ahora mismo es uno de los principales motivos de orgullo de la entidad.
Duelen esas afirmaciones sin fundamento y es motivo de orgullo que nuestras campeonas quieran continuar aquí. Lo hacen porque saben que el presidente y su junta directiva creen en el femenino. Ejemplos, hay unos cuantos. ¿Quién ha creado La Masia femenina? La junta de Laporta. ¿Quién ha hecho el campo de entrenamiento que tanto reclamaban las futbolistas para evitar lesiones? La junta directiva de Laporta. ¿Quién ha mejorado las instalaciones? La junta directiva de Laporta. ¿Quién ha promovido los desplazamientos multitudinarios de aficionados como el que se vivió hace unas semanas a Bilbao? La junta directiva de Laporta. ¿Quién ha logrado que el primer equipo femenino tenga un avión personalizado para realizar algunos desplazamientos? La junta directiva de Laporta. ¿Quién ha abierto de forma recurrente el Spotify Camp Nou y también el Olímpic Lluís Companys de Montjuïc para que el femenino jugase encuentros importantes ante un gran número de aficionados? La junta directiva de Laporta.
Muchas acciones que demuestran la apuesta firme de esta junta directiva por el femenino. Pero hay más. Solo hay que repasar algunas cantidades relacionadas con esta sección. Es cierto que la herencia que recibimos de la anterior directiva que presidía Josep Maria Bartomeu en relación con el femenino era buena, pero esta directiva ha mejorado en mucho aquello que funcionaba. Los ingresos del femenino en la temporada 2020-21 eran de 4.700.000 euros. Desde la llegada al palco de esta junta han ido aumentando paulatinamente y esta temporada se situarán cerca de los 18 millones de euros. Hemos multiplicado por cuatro los ingresos. Si nos fijamos en el coste salarial deportivo, en la temporada 2020-21, superaba en poco los cinco millones de euros.
Este curso 2023-24, se ha colocado en poco más de diez millones de euros. Hemos multiplicado por dos este concepto, pero hemos pasado de que representase más del 100% de los ingresos a situarlo alrededor del 55-60%. Es decir, el club se ha adecuado a la política recomendada por la UEFA. Es decir, que hemos podido aumentar los salarios de las futbolistas para tener un equipo campeón gracias al gran trabajo que se ha hecho para multiplicar por cuatro los ingresos aprovechando el contexto. Un mérito enorme del equipo que coordina Judit Farré desde el club con el apoyo de la directiva personalizado en Xavier Puig, el directivo responsable del fútbol femenino y a quien he visto luchar un montón de mejoras.
Todos los ingresos logrados hacen que el fútbol femenino sea una sección que se mantiene por sí sola, que se pueda invertir en fichajes y en las cracks que ya tenemos y que no se pierda dinero a pesar de las muchas primas que el club tiene que pagar por los muchos títulos que están logrando nuestras jugadoras. Títulos que también provocan que lleguen más patrocinadores y más ingresos. Porque el interés que hay en las reinas de Europa no deja de crecer.