Maccabi Tel Aviv llega al Palau Blaugrana como el equipo en mejor estado de forma del continente. 6 victorias consecutivas en Euroliga y 17 en todas las competiciones acompañan al equipo dirigido por Oded Kattash, conjunto que cuenta en sus filas con algunos de los mayores talentos ofensivos en el baloncesto actual. Más que una simple ‘piedra de toque’ para el Barça.
Wade Baldwin IV es la gran estrella de un cuadro macabeo que marcha 7o en Euroliga y que ocupa la primera de las cuatro plazas del ‘Play-in’, la nueva fase preliminar de los playoffs que se estrenará este curso 23/24. El estadounidense se ha llevado recientemente el MVP del mes de marzo y tiene al Barça entre ceja y ceja, un escenario perfecto para volver a exhibir su descomunal talento.
Élite de Europa
El escolta de 28 años está viviendo su máxima esplendor en Tel Aviv, ciudad a la que llegó en verano de 2022 procedente de Baskonia. El curso pasado ya explotó a nivel anotador y se convirtió en la primera referencia ofensiva de su equipo, una tendencia que no se ha detenido esta temporada.
Wade Baldwin IV, con 17.5 puntos por encuentro, es el tercer máximo artillero de la Euroliga y un quebradero de cabeza para cualquier defensa de primer nivel. Tan solo Mike James (18.8) y Markus Howard (18.5), también norteamericanos, superan al de Maccabi en esta selecta lista. Dónde si los supera es en el acierto desde la larga distancia, y es que Baldwin ostenta un excelente 40.2% en triples, además de un 85% en tiros libres.
Un super clase en Euroliga
El formado en la Universidad de Vanderbilt posee un físico privilegiado y capaz de dominar en el viejo continente. Es habitual ver a Wade haciendo uso de sus ‘muelles’ en acciones de mate o penetración a canasta, donde es prácticamente imparable. Más allá de ser una fuerza de la naturaleza de 1’93, el escolta es un ‘playmaker’ en toda regla.
Baldwin es capaz de generar jugadas de dónde no las hay y zafarse de sus defensores a través del dribling. A esta habilidad por encestar el balón le suma un buen instinto para encontrar a sus compañeros: este año promedia 5.0 asistencias por partido en Euroliga, 8a mejor marca entre todos los jugadores. El desempeño del estadounidense en cancha es clave para que Maccabi sea el segundo equipo que más puntos anota (87.6) y asistencias reparte (19.4) cada noche.
Baldwin IV exhibe sus muelles ante Estrella Roja de Belgrado / ANDREJ CUKIC
Su gran ‘pero’ es el carácter. Es un jugador extremadamente competitivo, pero su fuerte temperamento provoca que no acabe muchos partidos por culpa de faltas, técnicas o quejas fuera de lugar a los árbitros. Lo demostró unos meses atrás ante el Barça.
Viejo conocido del Barça
Su paso por la NBA fue más anecdótico que otra cosa. Los Grizzlies lo draftearon en el pick 17 del Draft de 2016, pero tras unas temporadas relevado a la G-League y sin protagonismo con Grizzlies y más tarde Portland Trail Blazers, Baldwin IV decidió cruzar el charco. Firmó por Olympiacos en verano de 2020 y su primer año en Europa fue decepcionante a nivel numérico, pero más tarde ficharía por un Bayern de Múnich en el que se haría un nombre propio.
En su primer año en el cuadro bávaro, Baldwin IV le endosó 29 puntos y 7 asistencias al Barça (41 de valoración), una impecable carta de presentación ante uno de los más grandes del torneo. No fue la última. El año siguiente (21/22) defendió los colores del Baskonia en Liga Endesa y los azulgrana tuvieron que volver a ‘sufrirlo’, esta vez hasta en 4 ocasiones entre todas las competiciones. Una victoria contundente de los baskonistas sobre los culés por 94-75 volvió a tener al estadounidense como máximo anotador, esa vez con 16 puntos y 8 asistencias.
En la actual campaña Maccabi y Barça se enfrentaron en una cita atípica, y es que el partido en el Menora Mivtachim Arena, feudo de los israelís, tuvo que celebrarse a puerta cerrada por problemas derivados con la guerra entre el país hebreo y Palestina. Los de Grimau se llevaron el triunfo pese a un ‘inspirado’ Baldwin, que acabó la noche con 19 puntos y, otra vez víctima de su carácter, recibió dos técnicas y se fue del pabellón antes de tiempo.