La caravana del pádel mundial desembarca en los Estados Unidos. Palabras mayores. La segunda edición de la Pro Padel League dobla o triplica la apuesta del curso pasado. El banco de pruebas que fue el torneo de la temporada 2023 sirvió de anzuelo para el curso actual. Más citas, más franquicias, más premio económico, más ciudades donde jugar y muchos más jugadores y jugadoras en los equipos que compiten para ganar el título.
“Que vengan los mejores del mundo hará que los partidos sean más atractivos. Habrá más emoción. Además, hemos añadido tres franquicias más a una liga que será mucho más competitiva. Esto atraerá más público del mundo y hará crecer el pádel en Norte América”, contaba hace un par de días el comisionado de la Pro Padel League, Marcos del Pilar. Y de esto se trata. De hacer crecer este deporte en los Estados Unidos y Canadá junto a los mejores jugadores y entrenadores del mundo… y con algunas señas de identidad propia. Lo de la Pro Padel League será a lo grande: el Ultra Club Miami, que acogerá los dos torneos que abren el fuego de la competición estas dos próximas semanas (del 2 al 7 y del 9 al 14 de abril), se renovó hace unos meses y tiene 28 pistas.
“XXL, como se hacen las cosas en los Estados Unidos”, comenta cerca del complejo deportivo una deportista universitaria española que hace años que vive en la ciudad norteamericana. “Creo que al torneo le falta un poco de visibilidad en la ciudad. Banners, carteles… la gente que estamos vinculados con el deporte de la ciudad sabemos que empieza pero parte de la ciudad seguro que no le ha acabado de llegar. Miami está de moda ahora… lo podrían haber aprovechado más”, añade. El pádel en la ciudad está creciendo pero los precios para jugar siguen siendo caros. “Lo entiendo porqué hay mucha menos oferta de pistas que en España”, reconoce esta deportista que está vinculada al futbol de la ciudad pero que es una enamorada del pádel.
Formato atractivo
En Miami, ya se disputan (de manera seguida) las dos primeras citas del campeonato. Los dos primeros torneos de la liga que va acabar desembocando en el play-off final en el que van a participar las mejores ocho franquicias de las diez que conforman la liga. La tercera y la cuarta cita -mismo formato que estos días en Miami- se van a disputar en Los Ángeles. La ciudad californiana albergará todos los partidos del 12 al 24 de agosto. Aún no se ha confirmado en qué club se va a disputar. Y allí se va a decidir quién juega las finales del mes de noviembre que se van a disputar en Nueva York. Puro lujo y todo a lo grande para ganar un premio de un millón de euros.
Las Vegas Smash, de Martita Ortega o Pablo Cardona entre otros, defiende el título ganado la temporada pasada ante los Cancún Waves, que se ha reforzado con Sanyo Gutiérrez, Vero Virseda o Carolina Navarro. En esta segunda edición de la PPL se suman tres franquicias nuevas: los New York Atlantis de Paco Navarro, Fede Chingotto, Delfi Brea, Tamar Icardo o Juan Martín Díaz, entre otros. Los Houston Volts de Claudia Fernandez, Claudia Jensen o Iván Ramírez. O los Flowrida Goats de Majo y Mapi Sánchez Alayeto, Pablo Lima o Zazu Osoro. Completan el torneo, los Toronto Polar Bears (Pincho Fernández, Marina Guinart o Victoria Iglesias), el Miami Padel Club (Tapia, Ari Sánchez o Jon Sanz), el San Diego (Miguel Lamperti, Maxi Sánchez o Lucía Sainz), Los Angeles BEAT (Tolito Aguirre, Jess Castelló o Alex Ruiz) y el Arkansas Matrix (Paty Llaguno o Gonzalo Rubio). El ‘roaster’ es de lujo para un torneo que va a tener duelos masculinos, femeninos y mixtos.